Nota publicada en el Informativo Semanal de la Bolsa de Comercio de Rosario el día 24 de septiembre de 2010.
En el mes de octubre se lanzaría un contrato de futuro de leche en polvo en New Zealand. Las características más importantes del mismo son las siguientes:
Como se expresó en el Semanario anterior, para el desarrollo de un contrato de futuro sobre una determinada commodity, el volumen de transacciones del producto subyacente debe ser importante. Como se puede ver en una tabla de ese Semanario, la producción de leche en polvo de New Zealand llega a alrededor de 640.000 toneladas. Si tenemos en cuenta la relación de 7.500 litros de leche fluida = 1 tonelada de leche en polvo, la utilización de leche fluida para producir las mencionadas 640.000 toneladas de leche en polvo, implican alrededor de 4.800 millones de litros de leche fluida.
Otra característica que el contrato de futuro debe tener es que el producto subyacente sea almacenable y de calidad homogénea, características que se cumplen con la leche en polvo.
El mercado de leche en New Zealand es libre y no hay intervención estatal fijando precios máximos o mínimos, y esta característica es fundamental para el desarrollo de un contrato de futuro.
También es importante la volatilidad. Si no hay volatilidad, un contrato de futuro tiene muy poco sentido. La volatilidad de la leche en polvo en New Zealand es una característica evidente. Los cambios de los precios que se movían entre 0 (cero) y 100 dólares desde febrero del 1994 hasta agosto de 2006 pasaron a tener cambio entre 0 y 600 dólares en los meses siguientes hasta mayo del corriente año.